Así lo señaló el Subsecretario de Desarrollo Regional, Felipe Salaberry, quien, junto al alcalde Claudio Rentería, visitó el templo que fue afectado por el terremoto del año 2015 y que dejó sus dependencias en mal estado y no aptas para realizar ceremonias religiosas. Para estos efectos, el municipio de Ovalle ya inició un proyecto de recuperación para optar al financiamiento de la Subdere.

Una luz de esperanza se enciende para los fieles que frecuentaban la Iglesia Corazón de María y asistían a misas y ceremonias religiosas, puesto que la Subsecretaría de Desarrollo Regional comprometió su apoyo para financiar el proyecto de restauración que está realizando el municipio de Ovalle, a través de sus profesionales de la Secretaría de Planificación Comunal (Secplan) y que busca conservar la estructura original y así permitir que este lugar se llene de vida como en antaño.

Este anuncio lo realizó el Subsecretario de Desarrollo Regional, Felipe Salaberry, quien junto al alcalde Claudio Rentería y el gobernador del Limarí, Iván Espinoza, visitó este tradicional templo, ubicado en la intersección de las calles Independencia y Carmen, que fue uno de los lugares más afectados por el terremoto que azotó a la región de Coquimbo el pasado 16 de septiembre de 2015, el cual alcanzó una magnitud de 8,4 grados en la escala de Richter. Este hecho obligó a la comunidad religiosa a cerrar las puertas a los fieles, para actividades masivas, como medida de seguridad.

Las autoridades recorrieron cada uno de los rincones de la Iglesia Corazón de María y el ex convento y constataron los daños estructurales que ahí existen. Felipe Salaberry indicó que trabajarán en conjunto con el municipio “porque el desarrollo de los pueblos y de nuestros territorios quedan inconclusos si no cuidamos el patrimonio, que ha sido parte de nuestra historia y aquí en Ovalle visitar esta iglesia y el convento, que ambos tienen más de 100 años de antigüedad, es un desafío para el municipio, para el Gobierno Regional y también para la Subsecretaría de Desarrollo Regional. Por eso hemos comprometido, con el alcalde, la disposición de nuestros recursos del programa Puesta en Valor del Patrimonio, para que en conjunto con lo que aporte el municipio de Ovalle y el Gobierno Regional, contribuir, subsidiariamente, con lo que se requiere para ir restaurando, paulatinamente, este lugar”. Por su parte, el alcalde Claudio Rentería valoró la visita del Subsecretario de Desarrollo Regional “porque es una muestra de apoyo importante para el proyecto que estamos realizando como municipio para recuperar este lugar tan tradicional de nuestra comuna. Trabajaremos arduamente con nuestros profesionales, porque queremos que en el corto plazo, este templo abra sus puertas y pueda recibir a los cientos de fieles que llenaban sus dependencias hace algunos años”.

El municipio de Ovalle está trabajando en varios aspectos y ya se avanzó en la elaboración del levantamiento crítico y ahora “se está viendo con un ingeniero especialista en construcción en tierra y en patrimonio, cómo hacer el levantamiento estructural tanto de la iglesia, como el convento” sostuvo la arquitecto a cargo del proyecto, Vanessa Hauway Kong. La profesional agregó que la siguiente etapa es finiquitar los aspectos técnicos del proyecto de restauración es decir “el revestimiento y ver el programa que se le va a dar al área del convento y las especialidades necesarias para configurar el proyecto como un todo y poder optar al financiamiento de la Subdere”.

En tanto, el gobernador del Limarí, Iván Espinoza indicó que “valoramos la visita del subsecretario que en su recorrido por la región llega hasta la capital provincial, para conocer en terreno la inquietud del municipio de Ovalle, por la reconstrucción de esta emblemática iglesia. Para nuestro gobierno es fundamental preservar el patrimonio cultural, así como fomentar el desarrollo de las regiones, por lo que ha manifestado el subsecretario por apoyar este proyecto de reconstrucción nos llena de alegría y seguiremos atentamente el proceso”

Tras el análisis realizado por el municipio, ambos lugares (Templo y convento), son restaurables y hay zonas puntuales que tienen daños importantes producto, principalmente, de la humedad, pero en ningún caso el lugar podría colapsar.

 

 

 

 

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