El evento, impulsado por el municipio de Ovalle, convirtió al principal paseo público de la ciudad en un parque de diversiones con diferentes atracciones, para los más pequeños. Juegos mecánicos e inflables, pinta caritas, paseos en el Barco Pirata y un show artístico fueron parte de las entretenciones que tuvieron los niños a su disposición de forma gratuita.
La plaza de armas se convirtió en un verdadero parque de diversiones para celebrar el Día del Niño. El municipio de Ovalle, impulsó este evento para que los más pequeños del hogar disfrutaran de un día preparado, exclusivamente, para ellos. Juegos mecánicos e inflables, pinta caritas, un rincón deportivo, con diferentes disciplinas y un show infantil, a cargo de la compañía Entrete Sueños marcaron esta jornada. A esto se sumaron los paseos en el “Barco Pirata” y en los carros bomba del Cuerpo de Bomberos de Ovalle, donde niños y adultos disfrutaron en familia.
Como es tradicional, el Orfeón Municipal de Ovalle realizó su retreta, pero esta vez cada uno de sus integrantes se disfrazó de los personajes infantiles de moda, quienes acompañaron al alcalde Claudio Rentería a recorrer la plaza de armas y entregarles un paquete de golosinas a los más pequeños.
Carlos González, de 8 años, disfrutó junto a sus primos e indicó que ha sido “todo muy entretenido, porque la hemos pasado muy bien, jugamos fútbol, Ping Pong y me reí mucho, porque a mí me gusta jugar mucho con ellos”. Joaquín Opazo, quien asistió con su madre, afirmó que “siempre vengo cuando se celebra el Día del Niño en la plaza, porque me divierto mucho”. Por su parte, Francisca Mena compartió con sus hermanos y sostuvo que ha sido un día “muy especial, porque ando con toda mi familia y me subí a casi todos los juegos porque me gustaron todos”.
El alcalde Claudio Rentería recalcó que esta es “una celebración que ya es tradición y lo hacemos con mucho cariño, para que nuestros niños disfruten junto a sus familias. Estamos muy contentos por la concurrencia que tuvimos a nuestro principal paseo público, porque vimos como los más pequeños ocuparon cada uno de los espacios que habilitamos, exclusivamente, para ellos”.
